Claves para la caza a rececho del corzo

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Como ya sabrás, la caza a rececho es una modalidad de caza que se practica en todo el mundo y que consiste en buscar a un animal en concreto por su trofeo, o sencillamente la búsqueda de un animal para darle caza, llevando a cabo un acercamiento sigiloso al mismo para darle muerte. Este tipo de caza se practica a pie y en él solamente interviene un cazador acompañado de un guarda que ejerce las tareas de vigilancia y control y que resulta clave en el éxito de la cacería. Cuando la pieza es localizada, se lleva a cabo una aproximación con el viento a favor para evitar ser detectado por el animal, realizando el disparo cuando se está a una distancia adecuada.

Los recechos de corzo quizás sean los más emocionantes por su dificultad. Abril es el mejor mes para hacerlo, ya que en estas semanas es cuando los machos dominantes están terminando el marcado de los territorios. Para ello suelen elegir los bordes de caminos, siembras o arroyos y suelen permanecer estables durante años. Con lo cual, es habitual que podamos encontrar a los corzos cada año por los mismos lugares.

Es cierto que cada día haya más aficionados a la caza del corzo y por eso cada vez hay más personas que necesitan empezar desde el principio para saber cómo se realizan este tipo de recechos. Por eso hoy vamos a dar las claves de cómo se llevan a cabo los recechos de corzo. Y a los que les gusta, pero llevan tiempo sin practicarlo, seguro que no les viene mal un repaso.

  1. Explorar el terreno

Los corzos son una especie muy territorial durante el periodo de celo. Por eso, es extraño que se separen del territorio concreto que han marcado, a menos que se vean obligados. Explorar el territorio nos ayudará a saber dónde se encuentra cada macho, pero es importante que sean ellos mismos los que se dejan ver, moviéndonos lo menos posible y siendo muy sigilosos. Generalmente los machos que toman el territorio por primera vez marcan mucho más que los machos que repiten en el mismo lugar que el año anterior.

  1. Localizar al corzo

Los corzos suelen dejar muestras de su presencia que nos pueden ser muy útiles para llegar hasta ellos. Por ejemplo, los rascaderos, las heces fecales al borde de las siembres y prados y las huellas son pistas de que el animal está cerca, de su tamaño y de la frecuencia con la que pasa por el lugar.

  1. El equipamiento

Para la caza a rececho del corzo no necesitamos tener a punto nuestro rifle, utilizando un calibre adecuado para nuestro objetivo. Pero también un equipamiento mínimo. Es imprescindible llevar con nosotros unos buenos prismáticos para poder localizar al animal sin ser vistos. Además deberemos llevar el conjunto rifle-visor a punto y una buena vara que nos servirá de apoyo. Por supuesto, todo aquello que queramos llevar puede ser útil, pero no esencial.

Por otro lado, hay que tener en cuenta que el corzo es un animal que posee un olfato y un oído muy buenos, por lo que es importante estar al tanto de las condiciones del aire, elegir aquellos caminos por los que hagamos menos ruido y buscar un lugar abierto.

  1. El lance

Antes de empezar es importante saber qué estamos buscando, de manera que podamos decidir si disparar a lo que tenemos delante o esperar. Todo depende de si estamos buscando un gran trofeo. Una vez que lo tengamos cerca, nos iremos acercando sigilosamente y esperaremos el mejor momento para tirar, que suele ser cuando el animal está de lado y en pie. Lo ideal es que no haya más de 150 metros de distancia, pero tampoco menos de 80 metros. En ambos casos correremos riesgos innecesarios. Además es importante meditar bien el disparo para conseguir dar en un punto vital donde consigamos dar muerte a la presa.

  1. El trofeo

Para saber a primera vista si un trofeo es bueno, debemos mirar el bulto entre las orejas. Pero donde realmente gana puntos un corzo es el grosor y el perlado del primer tercio de la cuerna que está entre oreja y oreja. Mientras que si es fina, difícilmente podrá obtener una buena puntuación.